El elemento biodegradable cumple con los requerimientos exigidos.
Una estudiante universitaria de nombre Rafaella de Bona Gonçalves, presentó un tampón biodegradable a base de la fibra del plátano, con el objetivo de ayudar a la población que muchas veces no cuenta con el factor económico durante su ciclo femenino.
Las casas comerciales que presentan los absorbentes comunes para la los ciclos de la mujer, representan una carga económica considerable que pudiera atenuarse si los mismos tuvieran un material de mayor sustentabilidad. Eso es lo que busca Gonçalves.
La estudiante de diseño de la Universidad Federal de Paraná (UFPR) desde el 2019 está enfocada en esta iniciativa. “Decidí elegir el primero, que es la erradicación de la pobrreza, para acabar con la pobrreza en todas partes y de todas las formas” menciona cuando se le pregunta por los objetivos buscados.

Gonçalves se ha preocupado por las mujeres sin hogar en situación de calle y que al igual que cualquier otra, la fecha de los ciclos femeninos debe ser atendida de forma correcta. “Fue entonces cuando me encontré con los problemas de las mujeres en la calle. Tienen necesidades diferentes [a las de los hombres]; por ejemplo, quedan embarazadas en la calle, tienen sus ciclos y a veces son tratadas de manera despectiva. Esto fue un shock para mí porque yo, como mujer, que tiene sus ciclos todos los meses, nunca me había parado a pensar en cómo atravesaban este período”.

En el país amazónico existen aproximadamente 13 millones de personas de bajos recursos y donde las mujeres se debaten entre comida o toallas sanitarias. Cuando dichas féminas son cabezas de familia, ya se sabe cuál es el resultado.

El nombre de este prototipo recibe el nombre de “Maria”, y ha sido un aliado en este particular. Investigando un poco, la emprendedora llegó a estas conclusiones: “Terminan usando un trozo de tela, un trozo de cartón y bolsas de plástico”. Muchas de ellas tampoco tienen ropa interior, por lo que no puede ser una toalla sanitaria” mencionó Gonçalves al percibir que lo mejor era un tampón biodegradable.

“Maria” es higiénica, práctica, desechable y universal. También es buena para el planeta porque es biodegradable y no incentiva la contaminación ambiental en su fabricación.

Explicando el proceso creativo, Gonçalves reconoce que se inspiró en la película de Hollywood, ‘Absorbing the Taboo’. “La idea surgió de un video que vi en Internet. En él, una mujer en la calle mostró cómo hacer un tampón con uno externo. Sacó la parte de algodón de la compresa normal, la enrolló y la convirtió en un tampón“.

En la actualidad el gobierno de Brasil está tomando medidas para la distribución de “Maria”. Tener acceso a productos de higiene de calidad no debería ser un privilegio; debería ser un derecho para todas las mujeres en el mundo.

El premio IF Design Talent Adward fue entregado en el 2019 a la mencionada ecologista por su emprendimiento llamado Maria. El galardón es uno de los beneficios de pensar en el bienestar ajeno.
“Recibir la noticia de ser uno de los ganadores fue increíble, especialmente con un proyecto social que plantea un problema que muchas veces se pasa por alto” finalizó Gonçalves.