Como padre de dos hijos, James Dutton vio que el cuerpo de su hijo respondía negativamente las curitas convencionales. Esto le motivó a pensar en una respuesta que beneficiara tanto a su hijo como al planeta, un material biodegradable hecho con fibras de bambú.
James descubrió también que las curitas convencionales generan una cantidad impresionante de residuos: unos 2.040 millones de metros de residuos al año. De hecho, los emplastos de tela y los tradicionales hipoalergénicos contienen microfibras de plástico poco ecológicas.
“Las ventajas de utilizar bambú ya estaban claras en mi mente desde el punto de vista de la sostenibilidad y la funcionalidad“, señala James. “Siempre he observado el enorme despilfarro en la industria médica y sentí que podíamos hacerlo mejor. Así que desde el principio tuve claro que si iba a crear un producto de consumo masivo, debía dejar el menor impacto posible en la Tierra“.

James hizo precisamente eso. Cada cura de PATCH, al igual que el envase de la tira, el embalaje de cartón reutilizado y el adhesivo de sellado superior, se descompone en el suelo o en cualquier otro componente normal. Aunque el tiempo cambia para cada una, las curas tardan en general entre 8 y 10 semanas en un ambiente apto para su degradación.

“Así que creamos PATCH para que fuera el primer esparadrapo 100% compostable del mundo, tan bueno para usted como para el planeta. A diferencia de los típicos vendajes adhesivos, las tiras de PATCH están fabricadas con fibra de bambú ecológica, lo que proporciona a los usuarios una sensación de “apenas presencia” y un acabado suave, para que la piel pueda moverse libremente sin restricciones“. Señaló James en una entrevista con el diario Balance.
Las curitas o vendas fabricadas con fibra de bambú son totalmente sostenibles y biodegradables. El bambú es antimicrobiano por naturaleza, lo que permite que la piel respire y se cure eficazmente, a la vez que favorece la recuperación de las afectamientos; además, es un recurso rápidamente renovable.

“La sostenibilidad y el hecho de dejar una huella mínima en el planeta son muy importantes para mí y para mi equipo, por lo que PATCH está fabricado con fibra de bambú 100% orgánica certificada, totalmente sostenible y biodegradable“. Señaló James.

En la actualidad, PATCH Strips cuenta con cuatro tipos de vendajes para evaluar diversas necesidades. Las naturales son estupendas si prefieres que sean sencillas y sin gasas enriquecidas, mientras que las de aceite de coco se adaptan a las abrasiones y rozaduras y las de aloe vera alivian. “Sin embargo, puedes utilizarlos todos en cualquier tipo de afectamiento”, dijo James.

Como este artículo se descompone completamente en ambientes adecuados o simplemente en un montón irregular de tierra fuera de su casa, estas vendas son excelentes para las personas que tratan de ir de tener una vida de cero residuos o simplemente reducir su huella en el planeta.