Un joven agricultor lleva la delantera en la iniciativa de acabar con los espacios sin producción en su localidad.
Jamiah Hargins empezó sembrando en el patio de su casa, hortalizas y limones. Esto lo hizo para su consumo personal. Solo que la producción de la tierra le iba a sugerir un cambio en las prioridades.
Al obtener más de lo que necesitaba, se le ocurrió organizar un intercambio con los vecinos. Para esto publicó en una red social la idea y muchos visualizaron la propuesta. Allí comenzó todo.
Jamiah le preocupaba que las hortalizas se dañaran, ya que tenía satisfecha su necesidad y las verduras logradas son de una calidad envidiable. Al hacer la publicación en Nextdoor que es la red social más utilizada en la zona, tuvo el impacto de mover a otros vecinos que estaban haciendo lo mismo.

La primera experiencia tuvo lugar un día domingo, que es cuando la mayoría de las personas descansan de sus jornadas laborales semanales.“Me encantó la cantidad de personas que estaban dispuestas a encontrarse con extraños un domingo por la mañana”, dice Jamiah gratamente sorprendido.
Los vecinos terminaron intercambiando ideas para sus cultivos lo que incluía el control de pllagas y la forma de aprovechar el espacio.

En primera instancia, los que acudieron a la cita traían alcachofas, col rizada, cebollas y calabazas que estaban destinadas al trueque. La convocatoria logró que se apersonaran al punto de encuentro unas quince personas. Pero el número seguiría en aumento cada domingo.
Kristin Kloc quien fue una de las personas que le gustó la iniciativa, dijo lo siguiente: “Comenzamos a hablar sobre el cultivo de alimentos y la importancia de la igualdad social”. Lo que era un simple trueque, tomó dimensiones de movimiento de masas.

Jamiah dice: “El individualismo solo puede llevarte hasta cierto punto. Cuando trabajas junto a otros, eres invencible”. El agricultor por convicción de vida, pensó que era necesario organizarse. De esa forma nació Crop Swap y todo parece indicar que no tiene fecha de expedición la creación de esta asociación.
Ha sido tal la aceptación en la comunidad Crop Swap que ha logrado transformar un estacionamiento vacío en un mercado de agricultores con 10 puestos, camiones de comida, sesiones de yoga y hasta música en vivo de forma gratuita.

Crop Swap ha logrado transformar el patio delantero de una casa en un lugar de cultivos. Algo que por regla general no es común. No sorprende ver en la comunidad de West Adams espacios con estas características.
Los miembros también ayudan a los vecinos a iniciar sus propios huertos urbanos. En conjunto realizan investigaciones para utilizar espacios como terrazas o plazoletas para sembrar hortalizas y que no desentone en la estética.

Los que en el pasado era un desierto alimenticio hoy es fuente de verduras y frutas. Fomentar la participación de los residentes sin importar su edad, raza o condición social es una excelente forma de crecer como seres humanos.
Crop Swap también dona un porcentaje de sus cultivos a un frigorífico comunitario para que otros se lo lleven cuando lo precisen. Jamiah Hargins cree que es una respuesta directa para que las personas de escasos recursos puedan adquirir productos de calidad y mejorar su alimentación.

“Lo que estamos haciendo es decir que, podemos crear nuestros propios sistemas, apoyar nuestra propia economía y cultivar alimentos que todos amamos” concluye Hargins.